Las mujeres pasan por tres etapas en su ciclo de maduración sexual:

• Caracteres sexuales secundarios. Desarrollo de los pechos, aparición de vello púbico, cambios en la superficie mucosa de la vagina, aumento de tamaño del útero y los ovarios, aumento de los niveles de estrógeno, ampliación de las caderas, mayor olor corporal y susceptibilidad al acné.
• Ciclo menstrual. Un ciclo recurrente de cambios fisiológicos que se producen en las chicas con capacidad reproductiva. Puede dividirse en varias fases: menstruación, fase folicular y fase lútea. La duración del ciclo varía en cada mujer, pero suele darse cada 28 días. La mayor cantidad de estrógenos (una hormona) que se produce en la pubertad hace que el tejido de revestimiento del útero se espese. Los folículos empiezan a desarrollarse en el ovario y, después de varios días, uno o dos de esos folículos se convierten en dominantes (los no dominantes mueren) y liberan un óvulo (proceso conocido como ovulación). Los restos del folículo dominante se convierten en el cuerpo lúteo, que produce grandes cantidades de progesterona. Bajo la influencia de esta hormona, el endometrio (revestimiento uterino) se prepara para la posible implantación de un embrión que daría lugar al embarazo. Si esa implantación no tiene lugar en aproximadamente dos semanas, el cuerpo lúteo involuciona y esto causa una fuerte bajada en los niveles de progesterona y estrógeno. Esta caída hormonal provoca que el útero se deshaga de su revestimiento y se produzca la menstruación (flujo de sangre por la vagina). La primera menstruación se conoce como menarquía, y suele producirse a los 12 años como media.
• Menopausia. Es el cese del ciclo menstrual. Se caracteriza por niveles muy altos de hormona estimulante del folículo (FSH). Suele producirse en la madurez, indicando el final de la etapa fértil. En realidad, la ausencia de menstruación es algo secundario, ya que el factor crucial es lo que ocurre en los ovarios.  Aunque no tenga menstruación, una mujer puede no haber llegado a la menopausia si uno de sus ovarios está todavía funcionando (incluso si se le ha extirpado el útero de forma quirúrgica). La menopausia implica el final de los ovarios, que es un fenómeno que lleva consigo otros efectos que afectan a muchos aspectos fisiológicos y psicológicos de la mujer. La transición a la menopausia es un cambio natural y no una enfermedad o un trastorno, aunque puede ser difícil para algunas mujeres. La edad promedio de comienzo de la menopausia en Occidente es de 51 años, y el rango de edad normal está entre los 45 y los 55.